Cinco partidos programados de noche este semestre,  incluido el del próximo domingo ante Tolima, ponen a Junior a pedir a gritos jugar por la tarde, con lo que de paso "ayuda a sobrellevar la crisis energética", pues el Metropolitano consume más de un millón de kilovatios  en las aproximadamente seis horas en las que se encienden las luminarias cuando hay fútbol profesional de noche.

“Los estadios tienen un consumo elevado de energía y teniendo en cuenta la crisis del sector eléctrico y la posibilidad de que el país se vea abocado a un apagón, es algo que se puede considerar”, dijo el presidente del Junior, Alfredo González –Ruibio.

Elñ balón está en terreno de Dimayor, quien deberá determinar si acata la petición del directivo Rojiblanco o no.

“ Sabemos que por la televisión va a ser difícil, pero hay que colaborar”.

El fútbol de noche es un horario atípico para los barranquilleros, quienes se acostumbraron al horario tradicional de las 3:30 p.m., pero la televisión determina los nuevos horarios con la meta de transmitir todos los partidos.

“Nosotros siempre jugamos a las 3:30 p.m.  y este año, con excepción de Jaguares, todos los hemos jugado de noche y eso se debe repartir, para cada horario no se debe poner a un equipo más de 3 partidos”, finalizó.